domingo, 10 de junio de 2012

Laos: tubing y algo más...

Por Felipe


Llegamos a Laos y desde la frontera se siente como lo que es: uno de los 40 países más pobres del mundo. La VISA italiana nos salió 36 dólares. Salía 35 pero te cobran un dólar más si pasás la frontera después de las 4 pm. La uruguaya sale 30, pero igual usamos el pasaporte italiano para estar seguros de no tener lío porque es el que venimos usando en todo el viaje… A esa altura estábamos tan acostumbrados a regatear todos los precios que casi regateamos la VISA: “35? Nooo, no me podés cobrar eso, acá hay malaria, no seas malo… mirá que sino me voy a Burma…”. Al final no lo hicimos, estábamos cansados por el viaje jeje

Cruzamos la frontera por Huay Xai y emprendimos viaje a Luang Prabang, a casi 500 km. En Laos se maneja por la derecha, por lo que volvimos a este lado de la calle después de Australia, Indonesia y Tailandia. En un viaje de 13 horas en un bus cuyos asientos eran tamaño asiático, los cuales no se recostaban más que 45 grados y además el camino era entre montañas por lo que nos movíamos de un lado hacia el otro, fue imposible dormir!  

En la primer tarde en Luang Prabang alquilamos unas bicis, las cuales salían 10.000 kips (1 dólar aprox 8.000 kips). Dicen que si pedías con frenos salían más caras jeje. El viaje en bici tuvo bárbaro, paseamos por la ciudad que es chica y los alrededores. En el camino nos encontramos con unas argentinas que conocimos en la frontera y con las cuales buscamos guest house juntos.



Cymaco repuestos en Laos

Cymaco.. qué quilombo!
Motos en todos lados, hasta arriba de los buses!
El centro de la ciudad es una península que queda entre el río Mekong y el río Nam Khan, el segundo nace del primero. Esta península es protegida por la UNESCO. Laos fue colonia francesa, por lo que hay mucha influencia de la arquitectura francesa.

A la noche, como no podía faltar, night market. Muy pintoresco y muy barato comparado con Tailandia. Lo que estaba increíble era la comida por ahí, no solo lo oriental sino algunas opciones occidentales. Te arman unas baguettes por dos mangos que son enormes y excelentes. Otro punto alto son los shakes, tanto de fruta como de oreo (Gracias Caroline por la recomendación!), tremendos! Vendían también tortas de decenas de gustos. En fin, nos partimos la boca jej

Atardecer en el Río Mekong
Con las argentinas haciendo la V de Victoria, lo que hacen los asiáticos en las fotos
Al día siguiente fuimos a unas cataratas que quedan a una hora de la ciudad. Fuimos en tuk tuk y como siempre hay que pelear el precio porque al principio te quieren fajar. Las cataratas son muy lindas y se puede nadar, además de tirarse de unas sogas colgadas en un árbol. Pasamos tres horas ahí.





Osos
Los tuk-tuk, versión Laos. En uno de esos fuimos a las cataratas



A la noche salimos. Nos habían dicho que había que salir temprano y era así, a las 11.30 el lugar cerró, un desastre!

Al día siguiente a la mañana nos fuimos a Vang Vieng, uno de los puntos más fuertes de joda en el sudeste asiático. El viaje fueron 6 horas con la versión laoense de Michael Schumacher, aunque con una minivan y entre las montañas. Con las curvas que pegaba más el calor que hacía porque unos alemanes cerraban la ventana por el polvito que entraba, hacían como 35 grados adentro, me vinieron ganas de vomitar. Agarré una bolsa y le pedí a los alemanes que abran la ventana. Estuvo cerca jeje. Al llegar un alemán le preguntó al chofer cuántas camionetas compraban por año jeje, el palo que le daba era muy zarpado!

La vista desde la puerta del cuarto de la guest house
Las calles de Vang Vieng

Antes de venir al sudeste asiático hablamos con distintos amigos para recibir recomendaciones y una amiga canadiense, Evelyn, nos dijo que no vayamos a Vang Vieng porque no tiene nada que ver con Asia. Al final vinimos porque nos gusta un poquito la joda, pero lo que dice Evelyn es totalmente cierto: Vang Vieng es puro europeo, australiano, yanquees, canadienses más algún otro de fiesta, prácticamente sin ningún contacto con la cultura del país. La decisión de venir o no es de cada uno, nosotros queríamos joda también y tenemos tiempo suficiente para meternos en la cultura en otros destinos. Pero igual remarco, lo que dice Evelyn es cierto y por momentos lo que se ve es grotesco.

Vang Vieng es famoso por el “tubing”, que es básicamente que uno alquila un gomón y va por el río y al costado del mismo hay bares desde donde te tirán una soga y te invitan shots y hay juegos y demás. Es una locuraaa! A la noche hay bares que tan muy buenos.

Al rato de llegar y encontrar guest house salimos a dar una vuelta y nos encontramos con las argentinas que habíamos visto en Luang Prabang. Ellas venían del tubing y fuimos a comer todos juntos. Nos contaron sus historias sobre el tubing. Dicen que al principio era asqueroso y que no le entendían la onda, los animadores (todos gringos) todos muy mamados y chupaneándose entre sí, sea hombre-mujer, mujer-mujer, hombre-hombre y cualquier combinación que se les ocurra de a más de 2 personas… En una parece que uno de ellos estaba hablando con el micrófono organizando un juego y agarró y chivó, y al toque viene otro flaco y se lo chuponea… sí sí, un asco! Desagradable! Grotesco! Igual dicen que no todo es así y que terminó siendo muy divertido.

La misma noche que llegamos fuimos a un boliche; en un momento estaba haciendo cola para comprar un trago en una barra y de repente siento un líquido calentito en mis piernas, me doy vuelta y veo a un flaco dado vuelta de alcohol y drogas que estaba meando. Le empujé y casi lo mato, por suerte no paso a mayores porque el flaco era uno de los animadores que trabajan ahí (el trabajo consiste en mamarse todos los días y noches…) y si se armaba ellos eran muchos. Me fui a bañar de una y re quemado jeje

Al día siguiente fuimos al tubing. Al toque de llegar empezamos a jugar en los distintos juegos, algunos tranquilos y otros no tantos. Veíamos que todos los animadores tenían pintados insultos para un tal “Matt Bennet” y la CNN, por lo que preguntamos quién era. Parece que es un periodista que hizo un artículo sobre Vang Vieng y salió también un informe en la CNN.

El artículo es cierto en algunas cosas y errado en otras. Es verdad que uno acá puede encontrar distintos tipos de drogas, pero a mí no me quema porque creo que consumirlas o no depende de uno. Con el concepto de Bennet, Montevideo y cualquier ciudad del mundo también serían un desastre, porque en Montevideo uno camina un par de cuadras en cualquier sentido y puede encontrar pasta base, pero depende de uno buscarla y consumirla o no. Y en Vang Vieng es lo mismo, hay de todo y se ven mucha gente hecha pedazos, pero también se ve gente bien (o no tan mal) y uno puede pasar por este paraíso fiestero con algo de conciencia y por ende sin lesiones, o con algunas mínimas nomás…


Uno de los bares del Tubing
Santi con unos nenes



Nos hicimos amigos de un grupo de aussies que andaban con una alemana, la cual era muy linda y divertida. En una estábamos bailando y se tira un eructo al mejor estilo Homero Simpson y la miro y me dice “I´m such a princess…” (soy toda una princesa) jeje, me maté de risa.

Durante esa tarde vimos a una periodista y un camarógrafo haciendo un informe, el cual salío en canal 9 de Australia y Santi y yo salimos (Ver al minuto 3:51 aprox, ahí aparece Santi dos veces, antes y después de una chica, y en el 8:17 salgo yo). El informe es sobre la locura del lugar, aunque yo creo que es muy sensacionalista. Habla de los fallecimientos de unos chicos australianos que mamados hasta las patas tuvieron accidentes mortales. Para mí es como tomar y manejar; en este caso tomar y “manejar” el tubing en un río con mucha corriente es riesgoso también. Y tirarse donde hay piedras también, pero los que fallecieron estaban todos muy mamados y por ende pierden la razón… Nosotros fuimos, algo creo que tomamos, pero no hicimos pelotudeces y pasamos sin lesiones ni nada… Ahí dejo el link al video...

Check out this great MSN video - Death in Paradise


Otro día fuimos a unas cuevas y Santi encontró otro lugar para tirarse desde alturas...



Después de otro día de tubing y alguna que otra noche, nos fuimos en un viaje de 30 horas a Hanoi, capital de Vietnam. En el camino pasamos por Vientiane, la capital de Laos. Contrario a mis expectativas, lo poco que vi me pareció muy lindo, aunque no es realidad del resto del país.

Laos fue corto en nuestra agenda de viaje (6 días nomás), pero nos divirtió!

Saludos!


jueves, 19 de abril de 2012

TAILANDIA PARTE 3: CHIANG MAI

Por Felipe

Después de la locura de Bangkok nos fuimos a Chiang Mai, al norte de Tailandia, la cual es la ciudad más importante del norte. El viaje fue en night bus, por lo que nos ahorramos el hotel. El bus estaba ok y se pudo dormir algo, a pesar de ser tamaño asiático. Salimos a las 21 hs y llegamos a las 6.

Chiang Mai es una ciudad universitaria y en lo que refiere al turismo es famosa por la ciudad en sí y también por la diversidad de opciones de turismo aventura y cursos de masajes y cocina thai principalmente. El primer día, luego de almorzar, nos dedicamos a buscar distintas opciones de tours para probar algo de eso. Terminamos reservando un tour en el que había trekking, rafting y paseo en elefante. Luego de eso recorrimos un poco la ciudad, que básicamente tiene dos partes; la ciudad vieja dentro de una muralla que solamente quedan unas partes de ella (construida hace aproximadamente 700 años para defenderse de los ataques de Burma) y la ciudad nueva afuera de la misma. Recorrimos también los principales templos de la ciudad, que quedan dentro de la ciudad vieja.






Monje laburando




Panqueques, muy buenos!
A la noche recorrimos el night market que está bueno, aunque después de casi un mes en Tailandia terminan siendo las mismas cosas en todos lados jeje, aunque el mercado taba bueno, siempre los mercados nocturnos tienen algo especial para mi gusto.


El segundo día hicimos el tour. Nos pasaron a buscar temprano y arrancamos viaje. Éramos 12: una pareja de alemanes de nuestra edad, un yanquee de 30 y pico, una india y una tailandesa estudiantes de turismo, nosotros dos y 5 chinos. La gente en general buena onda, aunque los chinos naturalmente se separaban. En un momento Santi le preguntó al yanquee qué hacía y resulta que el loco es “satellite tracker”, más o menos jeje. Igualito a nuestros trabajos en Australia…

El tour estuvo bueno aunque algo trucho también. Al principio nos llevaron a una granja de orquídeas… una truchada! 3 flores locas y unas mariposas… Después fuimos a ver las tribus “long neck” pero nosotros no entramos porque nuestro paquete no lo incluía. Igual no nos perdimos de mucho según los alemanes y el yanquee, dicen que está re armado para el turismo y para vender. Dejo una foto de internet para mostrar qué es…


Luego anduvimos un rato en elefante.




Reclama comida

Después nos dieron el almuerzo que estaba incluido y era un pad thai que estaba muy bueno. Después hicimos el trekking que duró una hora aprox y llegamos a unas cataratitas que estaban bien y era perfecto para descansar un poco ya que hacía muuuuucho calor.



Para cruzar el rio
Terminamos con el rafting que por mi parte fue la razón por la cual quise hacer todo este tour. Estuvo bien, no fue tan agitado pero nunca lo había hecho antes así que me gustó. Por otro lado fue algo choreo porque nos dijeron que era una hora de rafting y con suerte fueron 35 minutos… Al final nos llevaron a conocer otra tribu, el guía nos habló un cacho pero lo único que se veía eran puestos de artesanías jeje, cualquier excusa para tratar de vender.

Esa noche salimos a tomar algo con Lucho y María (la pareja de argentinos que habíamos conocido al principio de Tailandia y nos encontramos en Bangkok) y nos terminamos acostando tarde, por lo que al día siguiente nos levantamos tarde y no hicimos mucho más que buscar precios para irnos a Laos.

Lucho jugando con el ninio
A la noche fuimos a un mercado que hay los domingos que atraviesa gran parte de la ciudad vieja, algo así como 10 cuadras, era enorme! Había de todo menos videntes, porque Santi quería que le leyeran el futuro pero no encontró a nadie jeje

Musica en vivo

El último día a la mañana yo hice Bungy Jump. Está increíble, es muy rápido pero es una ráfaga de adrenalina. Valió la pena. 



50 metros de altura
El laguito abajo
 A la tarde fuimos a un templo que queda arriba de una montaña. El templo está bueno, aunque después de haber visto varios templos parecen todos iguales jeje. Lo mejor fue la vista de toda la ciudad desde la cima de la montaña


La gente no le hace caso a los carteles..


En la última noche, antes de partir a Laos, me di un Thai Massage. Me habían dicho que por momentos te tiran mucho. Es tal cual, te tiran para un lado, pal otro, pero ta bueno, muy relajante y cuando te tiran te estiran los músculos recién masajeados. El masaje me lo dio una veterana. Cuando iba a pagar me dijeron que me sentara y me dieron un té… me quedé tomando té con 5 masajistas todas veteranas, me agarraron de nieto jeje. No me pude dar el foot massage que me dijeron que está bárbaro pero resulta que tenía algunos cortes en los pies (chancletas más patas de rana buceando). Ya habrá oportunidad en otro país.

A la mañana siguiente partimos viaje a Laos. Camino a la frontera pasamos por Chiang Rai y paramos 20 minutos en el White Temple, que es la principal atracción de esta ciudad.






Después de eso nos fuimos a la frontera, cruzamos para Laos…

El ultimo Pad Thai??
Laos al otro lado del rio
Saludos!!